A pesar de su pequeño tamaño, las semillas de chía están llenas de nutrientes importantes. Son una excelente fuente de ácidos grasos omega-3, ricos en antioxidantes, y aportan fibra, hierro y calcio. Los ácidos grasos omega-3 ayudan a elevar el colesterol HDL, el colesterol "bueno" que protege contra ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares..