Mezcle la carne molida, la cebolla verde, el pan rallado y el queso parmesano en un tazón; forme albóndigas de 1 pulgada. Coloque las albóndigas en una bandeja para hornear y hornee durante 15-20 minutos o hasta que estén listas. Reduzca la temperatura del horno a 350 grados. Vierta los picatostes en el fondo de una cazuela de 13x9.