Coloque los trozos de apio en las bandejas de un deshidratador, dejando un espacio de 1/4 de pulgada en todos los lados entre los trozos. Si está usando un horno en lugar de un deshidratador, coloque las piezas en una rejilla colocada sobre una rejilla para hornear. Seque a 135 F hasta que el apio esté crujiente y seco. Esto suele tardar de 6 a 8 horas..