Las investigaciones muestran que un desayuno saludable también puede conducir a un estado de ánimo mejor, más positivo y equilibrado. Saltarse las comidas, especialmente el desayuno, puede causar azúcar en la sangre, lo que provoca irritabilidad, fatiga y confusión mental. Incluso puede hacer que su cerebro produzca un exceso de cortisol, haciéndolo sentir estresado y ansioso..