De hecho, las cáscaras de plátano no solo son comestibles, sino que también son ricas en varios nutrientes clave, como potasio, fibra dietética, grasas poliinsaturadas y aminoácidos esenciales (1). Se ha demostrado que la fibra, en particular, promueve la regularidad, estabiliza los niveles de azúcar en sangre y mejora la salud del corazón (2).