Dicho esto, las cebollas blancas son un sustituto totalmente aceptable del amarillo, especialmente si las estás cocinando. Según la sabiduría convencional, las cebollas blancas son más suaves y crujientes que las amarillas, por lo que es posible que desee usarlas en rodajas finas en una ensalada, picadas en pico de gallo o en otras preparaciones crudas..